¿Qué son las pantallas 2.5D?

Seguramente has oído la expresión en los últimos tiempos, y te has preguntado qué son las pantallas 2.5D. ¿Es sólo una expresión de marketing? Pues no, las pantallas 2.5D hacen referencia a una característica específica, que quizá no resulte muy útil... ¡pero te vamos a explicar lo que son para que eso lo decidas por ti mismo!

Una pantalla 2.5D (o pantalla contour) es aquella cuyo borde ha sido ligeramente contorneado. Es decir, que el vidrio en sus bordes tiene una ligera curva, fruto del pulido realizado. Ojo, no hablamos de un verdadero vidrio curvado, sino que los bordes se han rebajado para generar una sensación más suave. Los cantos del panel de vidrio no son rectangulares, se han redondeado ligeramente.

Esta imagen explica de manera muy visual qué es una pantalla 2.5D y cuáles son sus diferencias respecto a otros tipos de pantalla distintos:

 

¿Sirven para algo las pantallas 2.5D?

Las pantallas 2.5D tienen una funcionalidad principalmente estética. El efecto que generan es atractivo, y por eso los fabricantes las eligen. Ahora bien, también permiten nuevos diseños. Con una pantalla 2.5, el vidrio protector puede sobrepasar el marco del smartphone. Como los bordes son suaves y curvados, el usuario no notará fricción.

De hecho, algunos dispositivos incluyen pantallas 2.5D que no se aprecian demasiado, pero que evitan roces incómodos con los bordes. También cabe destacar que el contorneado se realiza al final de la fabricación del vidrio, y se puede aplicar sobre compuestos populares, como el Gorilla Glass, pero también sobre otros más corrientes. Eso sí, la propia pantalla no se ve afectada, sólo se modifica el vidrio que la recubre.

Está claro que las pantallas 2.5 no aportan demasiada utilidad real, pero se han puesto muy de moda. Modelos como los últimos iPhone o Nexus las han usado, y ahora incluso están llegando a la gama media. Aunque también aparecen pantallas realmente curvadas como las del SamsunG Galaxy S6 edge o del LG Flex 2.

Las pantallas 2.5D tienen futuro

Cuando las vimos en el iPhone 6, las pantallas 2.5D parecían muy premium, pero ahora mismo hay modelos de menos de 200 euros con ellas. En el futuro se van a popularizar, ya que su coste no es mucho más elevado que optar por vidrio normal. Es más, algunos protectores de pantalla ofrecen efecto 2.5D también.

Hablando de protección, una pantalla 2.5D es más proclive a romperse que una normal. Sobresale del marco del terminal, así que un golpe le afecta más... aunque la diferencia tampoco resulta abismal, en cualquier caso son bastante delicadas.

Así que ya sabes qué son las pantallas 2.5D. La verdad es que otorgan un toque distinguido a un smartphone, así que es normal que las marcas apuesten por ellas cada vez más. Desde luego, un pequeño detalle que marca la diferencia para los consumidores preocupados por la estética.

¿Qué opinas de las pantallas 2.5D? ¿Ya sabías lo que son, o no le ponías un nombre a este truco de diseño?