Las memorias USB han evolucionado lo suficiente para llevar en nuestro bolsillo una gran capacidad de almacenamiento. Incluso ahora somos capaces de tener pendrives que abogan por la seguridad para que sean "baúles" con llave y cerrojo, tal como ocurre con los Kingston DataTraveler 2000 que ofrecen ahora unidades de 4GB y 8GB cifradas.
Una de las marcas más relevantes por lo que respecta a este tipo de accesorios ha añadido capacidades de 4GB y 8GB, después de conocer el pendrive de mayor tamaño del mundo, a su familia de unidades USB cifradas denominadas como DataTraveler 2000. Por lo que se unen a las ya existentes de 16GB, 32GB y 64GB y se extiende, por lo tanto, el repertorio al que puede acceder el usuario de calle.
Los DataTraveler 2000 son memorias USB que ofrecen cifrado basado en hardware AES de 256 bits y una protección a través de un PIN con teclado alfanumérico integrado. Este producto en concreto está diseñado con profesionales TI de seguridad global, de pequeñas y medianas empresas, así como usuarios que busquen una protección más que importante a la hora de tratar sus datos y portarlos allí donde quieran.
Hay que mencionar que cada uno de estos pinchos USB no necesitan ni controladores de software o hardware y poseen un cifrado de hardware AES de 256 bits. El teclado alfanumérico mencionado, tiene la función de bloquear la unidad con una serie de palabras y números para una mayor protección. Esto significa que si por lo que fuera alguien intenta acceder a la memoria del USB, a los diez intentos fallidos la unidad borra los datos existentes y solicita una nueva contraseña.
Una solución más que importante si tratamos periódicamente con datos sensibles que hemos de tener salvaguardados de forma física en una memoria USB como la que plantea Kingstom con su línea DataTraveler 2000 y esas dos nuevas unidades de 4GB y 8GB que proponen más opciones de almacenamiento.
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