Más de 5.000 personas se implantan NFC en la mano para sustituir a las tarjetas

Más de 5.000 personas se implantan NFC en la mano para sustituir a las tarjetas

Usar el NFC del móvil para pagar o una tarjeta con esta tecnología al acceder al transporte público ya es habitual, y ahora algunos usuarios se implantan un chip con NFC en su mano que sirve como una tarjeta inteligente programable.

El implante es similar a un grano de arroz, de 15 mm de largo y 2 mm de diámetro, protegido por una capa de cristal biocompatible. En su interior va el chip NFC y un LED que se ilumina al usarlo, pero no necesita ser recargado.

No incluye batería, pues el lector de NFC se la suministra al acercarlo. Colocarlo es tan sencillo como hacerse un piercing, y en Suecia puede hacerse en un estudio de tatuaje, lo que ha animado a que 5.000 personas se pongan el implante en la mano.

Esta regulación ha hecho que la empresa sueca Dsruptive comience a popularizar el implante SIID, que cada usuario usa de forma diferente: como tarjeta para entrar al gimnasio o al transporte público, con un acceso directo a su web o almacenando otra información.

Especialmente curioso es que la empresa de ferrocarril pública de Suecia colabora con la iniciativa, así que se puede sellar el billete solo con acercar la mano al lector, sin utilizar una tarjeta física.

El implante se puede programar con una app para móviles, así que es relativamente sencillo configurarlo. Tiene espacio para 2 KB de información, suficiente para tareas de identificación.

Imagen - Utilizan su mano como una tarjeta física gracias al NFC

La posibilidad de usar el implante en niños o ancianos que se podrían perder, al menos por ahora, no se plantea, pues la compañía solo admite un uso voluntario. De todas formas, han vendido más de 50.000 implantes, pues nos los colocan personalmente, así que no saben cuántos de ellos están siendo utilizados en la realidad.

El implante NFC se ha diseñado para funcionar 25 años, y en principio no se cree que el chip pueda tener ningún efecto secundario dañino. Al colocarse en la mano no solo es sencillo de utilizar en el día a día, también se retira con facilidad.

Es cierto que cualquiera que se acerque lo suficiente puede leer el contenido, pero al igual que pagar con el móvil es seguro en la práctica, hay pocas circunstancias en que esto podría ocurrir y suponer un riesgo de seguridad.

Desde luego, la idea de los implantes NFC está en un momento muy inicial. El objetivo de Dsruptive es que el chip tenga aplicaciones médicas, por ejemplo, medir la temperatura o el pulso, pero por ahora no han logrado miniaturizar los componentes lo suficiente.

En estos momentos solo incluye la placa con la memoria, la antena NFC y el LED, pero que es suficiente para que algunos entusiastas prueben a "hackear" su cuerpo. A pesar de que las pulseras inteligentes y los smartwatches son muy compactos, no pueden competir contra algo que va dentro de uno mismo.

Los implantes NFC ya son el presente y, aunque colocar un chip en la mano genera dudas de privacidad, en realidad con llevar el móvil encima Google controla nuestra ubicación, lo que representa una amenaza más seria.

Vía: Retina

  • Ver Comentarios