¿La corriente estática causa daños al PC?

El ordenador es uno de los aparatos que más usamos en nuestro día a día, ya sea para trabajar, estudiar o simplemente como herramienta de entretenimiento. Por esto, es fundamental cuidarlo y mantenerlo en un buen estado para evitar que nos de fallos y tengamos que comprarnos otro.

Seguro que te ha pasado alguna vez de tener que llevar tu PC a arreglar porque no se encendía o porque el ordenador se apaga de repente. Esto puede ser normal, pero no siempre es debido a factores externos a ti. A veces, el origen está más cerca de lo que piensas.

Esto se puede deber a la conocida como corriente estática, que aunque no se pueda ver, está muy presente. Si no sabes en qué consiste realmente, no te preocupes porque aquí te lo contamos ya que esta puede ser la causa de que tu ordenador esté teniendo fallos o se haya estropeado alguna vez.

Así es cómo se genera la corriente estática

Quizá no estés familiarizado con este término o no conoces muy bien los riesgos que puede llegar a ocasionar, así que presta atención. Como casi toda la materia, los ordenadores están compuestos por átomos y moléculas eléctricamente neutros, con el mismo número de cargas positivas que negativas.

Pero cuando estas cargas se separan ya sea por fricción, cambios de temperatura o contacto, es cuando se produce la electricidad estática. En otras palabras, esta electricidad se produce cuando dos elementos distintos entran en contacto y más tarde se separan.

En el caso de los ordenadores, esto es debido a que los componentes de un PC están preparados para soportar un voltaje limitado. Por eso, si al tocarlos transmites un potencial de carga demasiado alto o si tu dispositivo ha venido con algún fallo de montaje, seguramente no vaya a funcionar como debería.

Aunque no lo creas, esta es una incidencia muy típica, que justifica por qué a veces el ordenador no arranca o por qué se estropean algunas piezas.

¿Cómo lo puedes evitar?

Una vez ya has entendido un poco mejor en qué consiste la corriente estática, hay que poner soluciones para prevenir que esta situación te pase en tu dispositivo.

Si lo que te está pasando es que le das al botón y no se enciende, es probable que sea por un problema de electricidad estática.

En este caso, lo primero que debes hacer es apagar el ordenador por completo y desconectarlo de la toma de corriente. Después, puedes probar a quitar los periféricos. Con esto me refiero al monitor, el cable de red y los dispositivos que utilicen un puerto USB.

Cuando hayas terminado, prueba a mantener presionado el botón de arranque unos 15 segundos. Y no te olvides de mirar en la parte de atrás de tu ordenador: si ves un interruptor, apágalo. Una vez desaparezca la energía estática que se ha generado, reconecta todo de nuevo y comprueba si ha dado frutos.

Si esto no te ha funcionado le toca al turno a los componentes internos. Prueba a extraer la memoria RAM o la gráfica y limpiarlos en profundidad.

Si no reacciona con esto, la única solución es quitar todos los componentes no esenciales para el encendido, comprobarlos y limpiarlos uno por uno hasta dar con el que está provocando los fallos. Normalmente, la solución es cambiar alguna de estas piezas.

En el momento en el que has probado cualquiera de estas opciones, y ninguna te funciona, puedes comprarte lo que se conoce como SAI interactivo. Es un aparato que ofrece un nivel intermedio de protección eléctrica convirtiendo la electricidad alterna en continua y al revés.

De esta manera, lo que consigue es que la corriente eléctrica llegue más "limpia", evitando acumulaciones de energía perjudiciales para tu PC.

Si todo falla, y realmente necesitas sustituir tu equipo, hemos elegido algunos portátiles con buena relación calidad-precio que son buenas recomendaciones.

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