Buscar trabajo es un hábito que realizan muchas personas casi a diario. Hoy en día, las estafas se han extendido a casi todos los campos, pero ahora según el FBI, están empezando a aumentar las estafas en las ofertas de trabajo online que ocurren cuando avanzamos en un proceso de selección que también resulta ser falso.
Es probable que te preguntes cómo son este tipo de estafas si únicamente estamos intentando conseguir trabajo. Lo que hacen las organizaciones criminales para la estafa, es copiar una página web de una empresa conocida, consiguiendo una interfaz calcada a la original y posteriormente anunciarse en portales de empleo.
Una vez hemos visto la oferta de empleo y hemos enviado el currículum a través de su página web, indicada en los portales de empleo, se pondrían en contacto con nosotros ya sea a través de email o por teléfono, pero nunca a través de una videollamada.
En dicha conversación nos ofrecerían más información sobre el puesto al que estaríamos optando o al que se ajustase nuestro perfil, a la par que una entrevista. En esta conversación ya sea telefónica o por email nos pedirían datos personales valiosos.
Esta información personal es identificable, a diferencia de una dirección IP cuya localización también es identificable, aunque para ello debemos disponer de conocimientos avanzados de informática. En este caso, algunos datos que recogen durante la entrevista (que en estas estafas nunca se realiza de forma presencial) son los siguientes:
- Nombre completo.
- Dirección.
- Dirección de email.
- Número de seguridad social.
- Número de pasaporte.
- Si disponemos o no de carné de conducir.
- Números de tarjetas de crédito/débito.
- Fecha de nacimiento.
- Número de teléfono.
Como vemos, se trata de información que puede ser de gran interés para organizaciones criminales y no para una empresa, la cual nos va a hacer llegar nuestro salario a través de una nómina, por lo que estos son algunos indicios de estafa.
Otra cuestión que quizás te estés preguntando es cómo nos requieren este tipo de información. Aunque es cierto que parte de la información que hemos comentado anteriormente, viene en el currículum que les hemos enviado, otra como nuestro número de tarjeta de crédito no.
Los estafadores suelen utilizar varios nombres y emails, supuestamente pertenecientes a una misma empresa, y probablemente sea siempre la misma persona la cual está escribiendo dicho email. De este modo, nos harían creer que estamos avanzando en el proceso de selección.
Llegará en un punto en el que nos solicitarán que les enviemos una cantidad de dinero a través de una transferencia bancaria, la cual resulta muy difícilmente rastreable, con motivo de que tenemos que abonar unas tasas para realizar la contratación o que incluso se nos requiere dicho dinero por habernos realizado la entrevista, una práctica cada vez más común hoy en día.
Nosotros en ningún caso deberemos de facilitar datos tan relevantes, ya que no se trata de la empresa a la que creemos haber enviado el currículum y no está a punto de contratarnos.
Por lo general, todo el proceso se realiza antes de la firma de contrato, aunque cada organización criminal dispone de sus propios métodos para hacerse con la máxima información posible.
Por el momento estas estafas se han visto extendidas en países como EEUU, en empresas las cuales buscan a trabajadores que realicen un teletrabajo constante. Para asegurarnos de que estamos solicitando un puesto en una empresa real, deberemos comprobar siempre el dominio o URL a través de la que se ponen en contacto con nosotros o hemos enviado el currículum.
Las víctimas según informa el FBI han llegado a perder 3.000 dólares de media cada una, por lo que resulta un tema bastante preocupante el cual se está expandiendo a cada vez más países.
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¿Conocías esta estafa? ¿Te fijas en las URL de las páginas donde envías el currículum?
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