YouTube suele darnos noticias por los contenidos que se suben a la plataforma o sus nuevas funcionalidades, pero hoy es protagonista por un hecho triste: ha ocurrido un tiroteo en la sede de YouTube en California.
Nasim Aghdam, una mujer de 39 años, presuntamente ha irrumpido en la sede de YouTube en San Bruno al mediodía (12:30, las 21:30 en la España peninsular), y ha iniciado un tiroteo durante el que 3 personas recibieron disparos.
La asaltante se quitó la vida tras el incidente, y no ha dejado ninguna víctima mortal, si bien un hombre de 36 años se encuentra grave a causa de los impactos.
El debate que vive Estados Unidos sobre las armas de fuego hace tiempo que llegó a las empresas tecnológicas, pero nunca habían sufrido un tiroteo como el que acaba de ocurrir en la sede de YouTube.
El tiroteo causó una gran caos en la sede de YouTube, aparte de un importante despliegue policial, si bien la plataforma propiedad de Google no experimentó problemas técnicos en ningún momento.
Una youtuber enfadada, la posible culpable
El dato más sorprendente es que el tiroteo podría deberse al descontento de la atacante respecto al funcionamiento de YouTube. Se piensa que pudo irrumpir armada en la sede de la empresa porque su canal había perdido rentabilidad.
Nasim Aghdam subía vídeos sobre los derechos de los animales, ofrecía recetas veganas y ejercicio físico alternativo. A principios de 2018 una serie de escándalos obligó a YouTube a ser más estricta con los vídeos que incluían publicidad, pues las marcas estaban preocupadas por el contenido cuestionable.
Muchos canales pequeños como el perteneciente a la autora del tiroteo en la sede de YouTube perdieron ingresos de forma abrupta.
Nasim Aghdam estaba enfadada, y denunciaba que uno de sus vídeos con 360.000 reproducciones solo le había generado 10 centavos de dólar, aparte de considerarse víctima de la censura para reducir el número de visionados.
Las quejas de los youtubers por la pérdida de suscriptores no son nuevas, pero iniciar un tiroteo por ello es ir demasiado lejos. No deberíamos descartar que la agresora sufriera alguna enfermedad mental que la haya llevado a estos extremos.
Tanto Sundar Pichai, máximo ejecutivo de Google, como el presidente Trump, han condenado el ataque. Aunque en Europa el debate sobre el control de armas no existe apenas, en Estados Unidos es una tema siempre delicado, y ahora ha afectado a uno de los sectores más pujantes del país.
Solo podemos desear que las víctimas del tiroteo en la sede de Google se recuperen de sus heridas, y que eventos tristes como estos no se repitan en el futuro.
¿Qué opinas de esta noticia? ¿Te sorprende que ocurra un tiroteo en la sede de una de las empresas más grandes del mundo?
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