Review: Samsung Galaxy Tab S5e LTE, ligereza extrema con pantalla Super AMOLED

El segmento de las tablets está en pleno proceso de adaptación tras el crecimiento de las pantallas de los smartphones. La Samsung Galaxy Tab S5e de esta review quiere darnos razones para optar por uno de estos dispositivos como sustituto de nuestro PC, veremos si lo consigue.

De hecho, este tipo de tablets van más allá del mero soporte para el uso y disfrute de contenido multimedia. Se dirigen a un público que quiera trabajar con la tablet y para ello se sirve de un interesante teclado que tendrá un apartado exclusivo en la review.

Tendremos que comprobar si la combinación de hardware y el software acompañan la experiencia de usuario y también si las 10,5 pulgadas son suficientes para olvidarnos, al menos durante un rato, del portátil como dispositivo central del trabajo en movilidad.

Ligereza hasta el extremo y buenos materiales

En este apartado Samsung no falla nunca. Sus dispositivos son del más alto nivel de componentes, ajustes y calidad de construcción en general. La Galaxy Tab S5e se alinea a la perfección con las últimas creaciones de la marca coreana y recurre al aluminio para cubrir la parte posterior de la tablet.

Siguiendo con la parte posterior, tenemos la cámara en la esquina superior izquierda, la serigrafía de Samsung cromada en el centro y otra serigrafía de AKG como sello que demuestran ser los encargados del sonido.

En el canto superior nos encontramos con un par de altavoces y un micrófono, en el derecho tenemos el conector para el teclado y en el inferior otro par de altavoces con el conector USB Tipo C.

Por último, en el canto izquierdo, vemos la botonera de control de volumen, el botón de bloqueo/desbloqueo que será también el lector de huellas y la bandeja para colocar una tarjeta SIM y así tener conexión por red de datos como si de un smartphone se tratara.

La parte frontal está protagonizada por la pantalla y tan solo unos finos marcos que ocupan un escaso 19% del total de la superficie. También tenemos cámara para selfies o videollamadas en el centro del marco superior.

Destacamos la genial ergonomía que se consigue gracias a sus reducidas dimensiones y peso, sencillamente es una delicia sostenerla en la mano y disfrutar de contenidos o de una buena tarde de lectura.

Para tenerla como dispositivo de apoyo en movilidad, los 400 gramos sin teclado ayudan mucho. Cuando la metamos en la mochila ni nos enteraremos de que la tenemos colgada a la espalda, simplemente estará ahí esperando a ser usada.

Samsung Galaxy Tab S5e, ficha técnica

Samsung ha recurrido al Qualcomm Snapdragon 670, 6 GB de memoria RAM, 128 GB de almacenamiento y un módulo LTE integrado en el chipset como reclamo. Si añadimos una estupenda pantalla y batería tenemos una tablet que nos servirá para prácticamente todo.

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Una pantalla Super AMOLED que sienta muy bien

Pasamos a hablar de la pantalla de esta Galaxy Tab S5e. Se trata de un panel Super AMOLED firmado por la propia Samsung con un tamaño de 10,5 pulgadas. Tampoco echamos en falta resolución, nos encontramos con una densidad de píxeles de 288 ppp, lo que se traduce en 1.600 x 2.560 píxeles.

Como decíamos, es una cantidad más que de sobra para una pantalla de este tamaño. Además, han mantenido una de las particularidades con las que Samsung dota a sus dispositivos, los colores vibrantes.

Estos colores los podremos cambiar por un rango de colores más plano, pero lo cierto es que no hará falta modificarlos, pues estos colores tan vivos le sientan muy bien a la capa de personalización de la compañía.

Tanto la respuesta táctil del panel como los ángulos de visión y el brillo son del más alto nivel. A pesar de tratarse de un equipo con panel Super AMOLED, consigue muy bien los blancos, aunque siguen tendiendo al amarillento, pero no son los paneles de anteriores versiones.

Destacamos también el formato 16:10. En un mundo como el de las tablets cada vez más copado por formatos más cuadrados como el 4:3 o incluso el 3:2, tenemos esta Galaxy Tab S5e panorámica.

Precisamente los formatos de pantalla que hemos mencionado antes buscan tener todo lo más a mano posible, aunque renuncian a parte del disfrute multimedia al verse obligados a insertar bandas negras (el contenido online está grabado para ser visto en formato panorámico) si ponemos un vídeo o película.

Hardware y rendimiento

Para el hardware interno, Samsung se ha olvidado esta vez de los procesadores desarrollados en su propia casa y ha recurrido al Qualcomm Snapdragon 670 como corazón de la Galaxy Tab S5e. Se trata de un procesador de la última hornada de 10 nm del fabricante de chips estadounidense y combina varios tipos de núcleos:

1. 2 núcleos a 2 GHz, los más potentes.
2. 6 núcleos a 1,7 GHz enfocados en el bajo consumo potenciando a la vez la autonomía de la tablet.

En total son 8 núcleos que la hacen funcionar a la perfección, incluso con tareas más o menos pesadas en el modo escritorio Samsung DeX, del que hablaremos en el apartado de software. En el apartado de la memoria RAM y espacio, Samsung monta 6 GB y 128 GB de almacenamiento en nuestra unidad, que son ampliables por microSD de hasta 512 GB.

También existe una versión con 4 GB de memoria RAM y 64 GB de almacenamiento que, si bien tiene menos pretensiones en cuanto a rendimiento, puede que sea suficiente para un uso enfocado al consumo multimedia o estudiantil.

Nuestra versión, la de 6 GB de RAM y 128 GB de almacenamiento, ha funcionado de maravilla en todas las pruebas. Hemos tenido abiertas aplicaciones de ofimática, navegador o música en segundo plano cambiando de una a otra sin mayores complicaciones.

No podemos decir lo mismo en los juegos más pesados. Su procesador de la gama media de 2.019 (aunque presentado en agosto de 2018) está más enfocado en el uso poco intensivo de los juegos complejos en 3 dimensiones, como pudiera ser Fortnite, y es que incluso hemos tenido algún lag en Minecraft, y en los juegos más sencillos, esta tablet de Samsung se desenvuelve como se espera de un dispositivo de su gama.

Ya lo dijimos anteriormente, pero en un uso corriente de consumo de multimedia, como sería escribir textos (esta misma review está escrita en la Galaxy Tab S5e), tareas de ofimática varias, navegación web y redes sociales, tendremos tablet de sobra.

Si ya somos usuarios más avanzados que necesitamos del uso de herramientas más complejas, quizá estas no se encuentren disponibles para Android, por lo que tendremos que pasar irremediablemente por un ordenador.

Además, la pantalla de 10,5 pulgadas, a pesar de ser buena, no es la mejor compañera de trabajo por su tamaño. No recomendamos esta tablet si lo que necesitamos es pasarnos varias horas al día jornada tras jornada para sacar adelante nuestro trabajo.

Puede parecer una cuestión baladí, pero últimamente se está poniendo de moda eso de renegar de un ordenador y trasladar la carga de trabajo a sistemas operativos móviles como iOS o Android, con algunos casos con éxito, pero que en otros momentos podría ser un fracaso.

Software: Samsung DeX contra las apps de Android

Por fin llegamos al apartado del software. Samsung ha sido una de las compañías más criticadas por la capa de personalización que instala en sus dispositivos, seguro que muchos recordamos la época de TouchWiz con un rendimiento bastante malo.

Los últimos lavados de cara le han venido realmente bien. Actualmente tenemos One UI como capa de personalización bajo el sistema operativo Android 9 Pie, que ha ido mejorando también frente a sus antecesores.

Tenemos una interfaz muy limpia y minimalista, algo que otras marcas como Huawei con EMUI o Xiaomi con MIUI parecen haber perdido. En cuanto a capa de personalización no tiene mucho más que decir, es exactamente la misma que podemos encontrarnos en un Samsung Galaxy S10, pero adaptada a las 10,5 pulgadas y al factor de forma.

Lo que sí queremos destacar es el Samsung DeX, la apuesta de la marca coreana para ofrecer una experiencia lo más parecida a la de un escritorio de cualquier ordenador utilizando aplicaciones Android.

Tenemos incluso soporte para teclado y ratón en DeX, es realmente útil si queremos manejarnos entre las ventanas (sí, las aplicaciones se abren en ventanas como en Windows) y por la interfaz en general.

Samsung DeX va un par de pasos más allá buscando que Android sea más productivo y deje de tener el sambenito de ser un sistema operativo para disfrutar de contenido multimedia y poco más.

Las aplicaciones son las mismas, así que tampoco podremos hacer maravillas si nos vemos limitados por ellas. Hay algunas apps como Word que tienen un recorte de funciones que puede llegar a ser importante y determinante si somos usuarios profesionales.

También dependeremos de tener un ratón a mano, puede ser un ratón Bluetooth o utilizar un adaptador de Tipo C (que no viene incluido) para conectar uno mediante USB. Para el teclado es lo mismo, aunque en este caso podremos utilizar uno diseñado por la propia Samsung que hará las veces de funda.

Queremos recalcar que, aunque no sea un problema de Samsung, muchas aplicaciones en Android no están bien adaptadas para su uso en pantallas grandes, por ejemplo Twitter, que mostrará tan solo un tweet a la vez si este contiene una foto.

Samsung DeX lucha también contra esto emplazando a las apps en ventanas para aprovechar mejor el espacio que de otra forma se vería desperdiciado totalmente, y lo consigue, pero no creemos que sea suficiente.

iPad OS viene pisando fuerte y puede dar un golpe en la mesa en los entornos productivos en tablets. Ya existen algunas alternativas semejantes en Windows, como la Microsoft Surface Go que tiene extras interesantes, como el soporte para lápiz.

Hasta que no sea la propia Google la que desde la base apueste por un sistema operativo competente para productividad, no tendremos mucho que hacer. La primera medida sería obligar de alguna forma a los desarrolladores a adaptarse a nuevos entornos productivos.

Sí, seguro que muchos estamos pensando en la Pixel Slate con Chrome OS, pero el problema lo sigue teniendo el convertible made in Google a nivel de sistema operativo, sobre todo de apps que no saben jugar de forma competente con el reescalado al ir variando de formato.

No queremos despedirnos del apartado de software sin dar una mención especial a Bixby. El asistente de Samsung también ocupa su parcela si nos desplazamos a la izquierda de la pantalla principal.

El diseño no es nada original, es el típico con tarjetas que usan prácticamente todas las capas de personalización como, por ejemplo, ColorOS 6 del Oppo Reno 10x Zoom. Tenemos a nuestra disposición y de un vistazo información interesante, como podría ser el tiempo, un feed de noticias, otro feed de Twitter o una tarjeta de YouTube, por poner solo unos ejemplos dentro de la enorme variedad existente.

¿Merece la pena la funda-teclado oficial?

La unidad de prensa de la Galaxy Tab S5e venía acompañada de una funda teclado. La idea es muy buena y la instalación magnética es sencillísima, aunque particularmente nos fiamos más de una que tenga alguna especie de enganche físico como ya tuvieron algunos modelos de hace años.

El desempeño del teclado es bueno, pero no lo recomendamos si tenemos que escribir una review extensa como esta. Las teclas tienen un buen tacto y un recorrido correcto, pero el tamaño viene condicionado por el de la tablet, así que no podemos hacer maravillas.

Teclas básicas como la de borrar son muy pequeñas y acostumbrarnos nos puede llevar demasiado tiempo. Si la queremos para trabajar en trenes o aviones será un punto positivo a tener en cuenta, pues no tendremos que llevar un dispositivo extra.

El teclado nos puede servir para responder correos electrónicos, por ejemplo, si queremos huir de los anodinos teclados virtuales, o incluso para redactar textos de forma puntual, pero poco más.

Algo que tampoco nos ha convencido es que el teclado carece de una integración completa en el sistema operativo. Por ejemplo, si estamos viendo un vídeo de YouTube y pulsamos la tecla derecha veremos que no avanzará el tiempo, ni tampoco cuando pulsemos la barra espaciadora ya que no se pausará el vídeo.

Tendremos que evaluar en cada caso si desembolsar los 129 euros de la funda-teclado nos merece la pena o si optamos por una funda sencilla y un teclado Bluetooth pequeño. También existen opciones de terceros, pero en este tipo de accesorios hay que tener cuidado.

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Sonido por AKG y Dolby Atmos

Si por algo venimos diciendo que la Samsung Galaxy Tab S5e es perfecta para el consumo multimedia es en gran parte por el sonido ofrecido por AKG.

En esta ocasión tenemos implementados 4 altavoces, uno en cada esquina. En cuanto a tecnología sonora, Samsung ha querido que Dolby Atmos sea la encargada de ofrecer un audio envolvente en 3 dimensiones.

Los 4 altavoces consiguen una experiencia sonora excepcional complicada de ver en una tablet. Los agudos y medios se reproducen a la perfección, sin relegar los bajos a una segunda posición, algo que nos sorprende gratamente.

La marca no ha proporcionado datos sobre la potencia del conjunto de altavoces, pero en nuestras pruebas ha sido suficiente para llenar de música una habitación mediana. El uso personal para contenido multimedia lo cubre y lo traspasa pudiendo ser nuestra pequeña estación multimedia cuando realicemos, por ejemplo, las tareas del hogar.

Más de 7.000 mAh de batería

La batería de la Galaxy Tab S5e es de 7.040 mAh. Es una capacidad excepcional que, unida al procesador, nos da como resultado una autonomía de unas 9 horas de pantalla si utilizamos una red WiFi o el modo avión.

Si optamos por utilizar una tarjeta SIM con conexión LTE tendremos algo menos de batería ya que dependemos mucho de la calidad de la señal.

También cuenta con carga rápida de 18 W, una cifra que se ha quedado algo por detrás de los últimos estándares de carga y que se notará algo lenta (a pesar de ser rápida) en una tablet con más de 7.000 mAh de capacidad.

Eso sí, tal y como nos tienen acostumbrados los procesadores ARM, en espera es un auténtico mechero. Si no está conectada a una red WiFi ni a una de datos la batería sencillamente no baja, por eso es perfecta para dejarla en la mochila y olvidarnos de cargarla, como sí tendríamos que hacer con un ordenador portátil.

Samsung Galaxy Tab S5e: una cara bonita puede no ser suficiente

Vamos cerrando ya la review y lo hacemos tratando el no soporte del S-Pen de Samsung. El lápiz digital que tan bien funciona sería perfecto para dar un motivo más de que nos compremos la Galaxy Tab S5e.

Con él tendríamos un producto todavía más redondo y podría ser un verdadero aliciente para los sectores educativo y profesional. Tomar notas de puño y letra en una reunión o en clase es bastante más natural y rápido que hacerlo con un teclado cuando al texto puro se le adjuntan dibujos o esquemas.

En cuanto al apartado fotográfico, esta tablet de Samsung monta una cámara trasera o principal de 13 megapíxeles y una delantera de 8 megapíxeles. Ambas son muy justas y nos servirán para poco más que sacarnos de un apuro o hacer videollamadas.

Nuestra versión con LTE, los 6 GB de memoria RAM y los 128 GB de almacenamiento tienen un precio de venta al público de 569 euros. La versión también con LTE, 4 GB de RAM y 64 GB de almacenamiento marca 499 euros en la etiqueta.

A esos precios hay que sumarle los 129 euros que cuesta de forma oficial la funda con teclado, un montante total muy importante que se acerca peligrosamente a los 700 euros en la versión más cara.

Después de esta review tendremos que valorar si nuestras necesidades se ajustan completamente a las de la Samsung Galaxy Tab S5e. A nosotros nos ha encantado, pero deberemos tener muy presente el tipo de dispositivo que nos llevamos a casa con sus pros y sus limitaciones.

Los puntos fuertes de la Samsung Galaxy Tab S5e en nuestra review

1. Ligereza y calidad de construcción.
2. Muy buena pantalla: tacto, resolución y colores sobresalientes.
3. Audio AKG de gran calidad.
4. Autonomía.

Los puntos débiles de la Samsung Galaxy Tab S5e en nuestra review

1. El rendimiento en Samsung DeX nos ha dejado fríos.
2. Sistema operativo.
3. Cámaras testimoniales.

Nuestra valoración

1. Diseño: 9
2. Pantalla: 9
3. Hardware: 7
4. Autonomía: 8
5. Software: 6
6. Precio: 6
7. Puntuación global: 7.5

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