La persecución contra las IPTV pirata continúa de manera cada vez más creciente, y en nuestro país ya se empiezan a ver signos de ello desde hace tiempo, culminando recientemente con la detención de un hombre en Alicante que vendía suscripciones IPTV ilegales.
Tal y como ha afirmado el Grupo de Delitos Tecnológicos de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Alicante, todo comenzó cuando un representante de un medio de retransmisión deportiva interpuso denuncia por haber encontrado una cuenta en redes sociales que ofertaba de manera ilegal suscripciones IPTV ilegales que le afectaban de manera directa.
Fue entonces cuando el citado grupo se puso manos a la obra para averiguar quién estaba tras esa cuenta en redes sociales y consiguieron sacar bastantes datos interesantes antes de dar con él en persona.
Para empezar, consiguieron sacar en claro que había suscripciones de diferentes niveles, desde 7 libras hasta 50 libras. Este último plan daba acceso ni más ni menos que a casi 600 canales de televisión, especialmente orientados a personas angloparlantes.
Otro dato importante que encontraron los agentes es que los pagos llegaban a una cuenta bancaria alojada en Reino Unido, aunque después se descubrió que estaba vinculado a varias para tratar de no levantar sospechas.
Sin embargo, fue uno de los anuncios del supuesto infractor el que delató en gran manera su ubicación. En él afirmaba contar con una experiencia de "diez años suministrando IPTV a bares y restaurantes de Benidorm, con soporte las 24 horas del día, los siete días de la semana".
Con todo esto sobre la mesa, se pudo llegar a la conclusión certera de que el responsable detrás de dichos anuncios era un hombre británico de 62 años residente en Benidorm, y este ha sido detenido por haber cometido un supuesto delito contra la propiedad intelectual.
No obstante, las autoridades han conseguido sacar aún más información tras realizar el registro en la vivienda del detenido. Este contaba con su propio servidor, dos dispositivos IPTV, un teléfono y un portátil desde el que controlaba los servicios que promocionaba en redes sociales.
Entre otros hallazgos, el más relevante sucedió cuando los agentes del orden accedieron a la plataforma de pagos donde se gestionaban las suscripciones a sus servicios. Encontraron que el supuesto implicado recibió casi 5.500 pagos que juntos amasaban una cantidad de unos 212.000 euros.
Ya vimos hace unos días como en Madrid un ciudadano fue condenado a 1 año de cárcel y 15.000 euros por vender dispositivos IPTV piratas, mientras que en varios países del mundo sigue la lucha antipiratería, resultando en el cierre de varios servicios IPTV ilegales.
En cuanto a este ciudadano detenido en Alicante por, supuestamente, vender suscripciones IPTV ilegales, ahora falta esperar a ver cuál será el resultado del proceso judicial en el que ya se encuentra.
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