Una buena conexión a Internet se ha convertido en una necesidad básica para los hogares y la velocidad, de bajada y subida, es fundamental. Disfrutar de tu serie, postear en redes sociales, jugar online o que en esa videollamada se te vea perfecto, depende de los “megas” de velocidad que tengas contratados. Pero, ¿de los de bajada o de los de subida? Te lo contamos a continuación.
La calidad del funcionamiento de Internet varía con multitud de factores: tu router, tu conexión (WiFi o por cable Ethernet), tus dispositivos, e incluso de la estructura y tamaño de tu casa. Por supuesto, también de la actividad que estés realizando al conectarte a la red.
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En muchas ocasiones las compañías obvian esta información y por lo general remiten sus datos a la velocidad máxima que se puede llegar en descarga o bajada, aunque también es habitual, y casi todas las compañías ya lo ofrecen, packs simétricos entre ambas velocidades.
Es necesario, por tanto, diferenciar estos dos conceptos y preguntar sobre ellos a la hora de contratar nuestra tarifa. Velocidad de bajada y de subida. Seguro que has oído alguna vez sobre ellos, pero ¿sabes realmente qué son? Y, lo más importante, ¿sabes cuál te conviene más dependiendo de tu uso de la red?
Velocidad de bajada (descarga)
La velocidad de bajada es probablemente la más conocida de las dos, generalmente la que más potencia tiene y a la que normalmente se refieren los Mbps (megabits por segundo) de las tarifas cuando no son simétricas.
Este parámetro mide la rapidez con la que se pueden descargar datos de la red, incluyendo la navegación por páginas web o la velocidad en que se carga el nuevo capítulo de tu serie favorita. Si bajas grandes archivos, como videojuegos, necesitarás una buena velocidad de bajada para descargarlos (también para jugarlos online).
Velocidad de subida (carga)
¿En qué difiere la velocidad de subida de la de bajada? Sencillo. La velocidad de subida es la rapidez con que tu red envía datos a Internet, ni más ni menos. De modo que la velocidad de subida será crucial si subes habitualmente archivos, posteas en redes sociales, subes vídeos a YouTube, haces streaming en directo o realizas videollamadas. También, si juegas a videojuegos online.
En definitiva, la velocidad de subida es clave en todo proceso que requiera que tú envíes información a la red y no al revés. Generalmente, todo lo que implica comunicación a través de la red requerirá una buena velocidad de subida.
Cómo medir la velocidad de tu Internet
Además de las velocidades de bajada y subida, es necesario conocer otro parámetro que determina el buen funcionamiento de tu red: el ping o latencia.
El ping mide el tiempo en que los paquetes de datos viajan entre dos dispositivos en la red (cuando son subidos o bajados), es decir, la buena conexión que tiene esa red con los servidores con los que se comunica.
Por eso, al contrario que con los Mbps, un valor bajo en ms (milisegundos) es mejor que uno alto. Si quieres conocer tu velocidad real de bajada, de subida y tu ping, en El Grupo Informático contamos con un test de velocidad de conexión. Tan solo deberás clicar en iniciar y en unos segundos tendrás todos estos datos para conocer los Mbps reales que llegan a tu router.
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