Ya se ha hecho oficial la fusión de Orange y MásMóvil, que llevaba meses siendo negociada entre ambos operadores de telecomunicaciones. De esta fusión saldrá el primer operador español por número de clientes, con una considerable variedad de marcas, incluyendo Yoigo, Jazztel, Pepephone o Euskaltel.
Orange España y Grupo MásMóvil comenzaron las negociaciones a principios de marzo de 2022, y ahora hay un acuerdo definitivo. La nueva empresa se repartirá al 50% entre los dos grupos, en lo que se denomina "joint venture", y las decisiones las tomarán en conjunto también al 50%.
Eso sí, más adelante Orange tendrá la posibilidad de comprar toda la nueva empresa, si se cumplen ciertas condiciones. La joint venture está valorada, según los dos socios, en 18.600 millones de euros, y exigirá endeudarse unos 6.600 millones de euros para cerrar la fusión.
Al compartir el despliegue de fibra y antenas móviles, la nueva compañía será más eficiente, aunque en realidad hace tiempo que comparten partes de sus redes.
La nueva empresa incluye los siguientes operadores principales:
- Grupo Orange España: incluye Jazztel, Simyo, la antigua Amena y Orange.
- Grupo MásMóvil: incluye Yoigo, Pepephone, Euskaltel, R, Telecable, Virgin Telco, Lebara, Llamaya, Guuk y MásMóvil.
Por supuesto, ahora se podrían reorganizar las marcas comerciales, pero en principio los actuales clientes no deberían notar ningún cambio. Es poco probable que se vayan a cerrar operadores en un primer momento, y menos que haya que realizar cambios de tarjetas SIM o en las instalaciones de fibra.
Ahora la fusión requiere la aprobación regulatoria en España por parte de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia. Aunque lo lógico es que se haya estudiado bien este aspecto, hablamos de una operación agresiva que pondría a Movistar como segundo operador español, pues la joint venture sumaría 31 millones de clientes.
Los operadores españoles llevaban años quejándose de un mercado muy fragmentado, que redundaba en precios muy bajos y ponía en riesgo la capacidad de seguir invirtiendo en las redes fija y móvil.
Las autoridades deberán valorar si esta concentración del mercado es acorde a las leyes de la competencia. Tradicionalmente, las fusiones no suelen encontrarse problemas legales, pero tras la prohibición en EE.UU. de que Qualcomm comprase a ARM, han aumentado las críticas a las compras y uniones entre empresas de gran tamaño.
Orange y MásMóvil esperan ser una única empresa en algún momento de la segunda mitad de 2023 si todo sale de acuerdo a sus planes.
A medio plazo, la fusión de Orange y MásMóvil puede tener un impacto importante en los clientes, sobre todo si reduce la guerra de precios en el mercado de las telecomunicaciones español. Habrá que ver si eso redunda en más inversiones que amplíen la cobertura de fibra y 5G, u otras mejoras en los servicios.
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