Prohíben usar ChatGPT por problemas con la privacidad

Prohíben usar ChatGPT por problemas con la privacidad

La inteligencia Artificial no es tan confiable como creemos, de hecho, Italia ordena la prohibición de ChatGPT por problemas con la privacidad. Se trata de una medida tomada por parte del Garante para la protección de datos personales, con la que ordenó, con carácter temporal, el procesamiento de datos de los usuarios italianos por parte de OpenAI.

Además de esta medida, la institución abrió una investigación para determinar la forma en la que el software de Inteligencia Artificial gestiona los datos de sus usuarios. Hay que recordar que apenas el 20 de marzo, ChatGPT tuvo una fuga de información sobre la facturación de los usuarios y la filtración del historial de búsquedas realizadas en su servicio.

¿Es ChatGPT seguro y fiable?

Bloqueo temporal de OpenAI

La acción llevada a cabo por las autoridades italianas, ocurre tras determinar que los usuarios no son informados debidamente sobre los datos recopilados por parte de la empresa detrás de ChatGPT, además no existe una base legal que justifique la recopilación.

No logran comprender por qué se realiza el almacenamiento masivo de datos personales para el “entrenamiento” de los algoritmos que están detrás de la plataforma, ya que no existe ni el consentimiento, ni una justificación al respecto.

Además, señalan que la información suministrada por ChatGPT carece en algunas oportunidades de rigurosidad, por lo que se hace un tratamiento inexacto de los datos personales que puedan estar allí almacenados.

Así mismo, las autoridades destacan que ChatGPT está dirigido a usuarios mayores a 13 años; sin embargo, señalan que la plataforma no cuenta con los medios necesarios para poder verificar que la persona detrás del teclado efectivamente cumple con la edad mínima de uso. Esta acción coloca en riesgo a menores de 13 años a la exposición de información sin verificar e inadecuada.

Actualmente, OpenAI no cuenta con una oficina propia en Unión Europea; aunque, cuenta con un representante ante el Espacio Económico Europeo, el cual cuenta con un plazo de 20 días para que la plataforma pueda ajustarse a la petición del gobierno italiano o tendrá que enfrentar una multa de hasta 20 millones de euros o el 4% de su facturación global.

Esta es una medida que se extiende desde Europa a todas las compañías tecnológicas que se encuentran dentro de alguna irregularidad y que no ha sido reparada en el tiempo establecido, algo que incluso podría suceder con WhatsApp, pero en Reino Unido.

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