Cada vez está menos claro el futuro de OnePlus, y la noticia de que Oppo (su marca matriz) prepara recortes en Europa solo arroja nuevas dudas sobre su continuidad. La estrategia de OnePlus en los últimos años ha estado muy cuestionada, y no es de extrañar que los resultados sean malos.
Hace apenas unos días supimos que Oppo prepara recortes en Europa, en mercados clave como Reino Unido y Alemania. La crisis está afectando especialmente a sus ventas, así que no sería extraño que OnePlus se viera también perjudicada, pues su situación no es buena.
Desde mediados del año 2021 la marca de OnePlus ha pasado de ser una empresa independiente a una división de Oppo. A finales de 2022 se anunció un "relanzamiento" de OnePlus dentro de Oppo, que realmente sonaba a que las cosas no iban bien, y necesitaban replantearse su enfoque.
La deriva de OnePlus comenzó en el 2020 con el OnePlus Nord, su primer gama media, que realmente hizo un buen papel. Hasta entonces, la empresa solo vendía móviles premium, con un par de lanzamientos al año, y los usuarios apreciaban su gran atención al detalle.
Por desgracia, tras el Nord original llegaron varios gamas media mucho peores, que dilapidaron el prestigio de OnePlus. Además, comenzó a lanzar auriculares y smartwatches, de nuevo con resultados irregulares.
Otro aspecto que no gustó es que OxygenOS, la ligera capa de personalización sobre Android que aplicaba el fabricante, poco a poco se apartaba más del sistema operativo original.
A todo ello se sumó la escalada de precios, una constante desde que OnePlus nació con enfoque de bajo coste hasta la situación actual, donde sus móviles tienen precios similares a los mejores móviles Samsung o a los iPhone.
Quizá el problema de fondo es que OnePlus no supo o no debió expandirse, pues pasó de lanzar muy pocos móviles al año con una calidad muy alta a ofrecer un amplio catálogo irregular, cuando no mediocre. De hecho, algunos de sus smartphones son diseños de Oppo renombrados, no modelos propios.
Oficialmente, Oppo y OnePlus niegan que vayan a abandonar Europa, y las filtraciones apuntan a que Oppo quiere centrarse en los países donde ve más potencial. Por desgracia, no parece fácil encajar a OnePlus en esta ecuación.
El reciente OnePlus 11 es un buen móvil, pero no destaca en el panorama de la gama alta. En la gama media, OnePlus lo tienen muy difícil con competidores tan agresivos como Xiaomi o Motorola.
En resumen, el futuro de OnePlus en Europa genera dudas, y quizá la empresa debería reconocer que necesita volver a sus orígenes. Lanzar menos productos, centrarse en la calidad y poner precios ajustados, antes de que pierda todo el prestigio que tardó años en acumular.
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