Tengo un router Fritz!Box, y no está nada mal. Pero la marca tiene mucho que hacer si quiere crecer en España

Muchos consumidores no conocen los routers Fritz!Box del fabricante AVM, pese a ser productos de calidad que vale la pena considerar para mejorar nuestra conexión a Internet doméstica.

Nosotros hemos elaborado una comparativa entre TP-Link vs Asus vs FRITZ!Box, donde la marca no sale tan mal parada. El problema es una estrategia que le dificulta crecer en España, pese a que llevan desde 2017 buscando su hueco en nuestro mercado.

AVM es una marca alemana, lo que debería representar un ventaja en un momento en que Europa necesita más que nunca su independencia tecnológica.

Pero los Fritz!Box miran demasiado al mercado local, por ejemplo, con diferentes modelos para conexiones DSL que en pleno 2025 son minoritarias en España, pese a que en Alemania aún mantienen cierta cuota.

Por supuesto, AVM dispone de routers de fibra y routers neutros, pero haría bien en centrarse más en ellos, dejando de lado las obsoletas conexiones ADSL/VDSL.

Sobre todo, necesita seguir reforzando sus routers neutros y sistemas WiFi Mesh. Los modelos con ONT integrada (es decir, que se conectan directamente a la roseta de fibra) son prácticos, pero en España es complejo realizar la configuración inicial para el usuario medio.

Yo mismo tengo un Fritz!Box 5590 Fiber, y estoy satisfecho. Por desgracia, no lo podría recomendar más que a "geeks" expertos, que sean capaces de configurarlo para su operador de fibra.

Precios altos y un marketing confuso

AVM es una marca premium, con precios bastante altos. Algunas prestaciones los justifican, como el cuidado software de Fritz!OS, que ofrece amplias capacidades, una interfaz clara y actualizaciones periódicas.

Pero AVM no siempre está a la última en tecnología, como demuestra el retraso de su gama WiFi 7 frente a la competencia. Además, sus productos de smart home no son demasiado atractivos, lo que impide crear un ecosistema completo como el que tiene TP-Link con Tapo.

En cualquier caso, los precios de los Fritz!Box son demasiado altos para España, y eso ha obligado a centrar la estrategia en los más asequibles Fritz!Repeater.

A AVM la cuesta competir con TP-Link, Asus o D-Link, pero directamente no tiene productos asequibles frente a marcas de bajo coste como Mercusys o Tenda.

A todo esto se suma una comunicación poco efectiva hacia los consumidores. Por ejemplo, intentando posicionar sus productos para el rentable público gamer.

Los Fritz!Box pueden ser una buena opción para los jugadores en lo técnico. Pero la realidad es que no están pensados para al gaming, y no es fácil cambiar esa percepción solo desde el marketing.

Un marketing un poco confuso que echa por tierra su esfuerzo en estar presentes en las principales tiendas. Los Fritz!Box y Fritz!Repeater tienen bastante presencia en cadenas como Media Markt, PcComponentes o Amazon, pero les falta notoriedad entre los consumidores.

Nuestra opinión es clara: AVM ofrece un buen producto, que puede necesitar algún ajuste en características o precio, pero el principal problema es que no está enfocando bien su trabajo en España, y eso le impide arañar cuota de mercado a rivales como TP-Link o Asus.

Conectado al WiFi pero sin Internet, ¿por qué?