Microsoft sorprende a todos: Xbox One sin Kinect estará disponible a partir del 9 de junio. La nueva variante sin este accesorio costará 399 euros. La compañía de Redmond ha rectificado para intentar recuperar las ventas que se está llevando Sony.
100 euros menos costará Xbox One sin Kinect, lo que deja su precio igual al de PlayStation 4 de Sony. Un duro golpe que pilla por sorpresa y con el que espera recuperar las ventas.
Los juegos exclusivos para Kinect seguirán al igual que los usuarios de la Xbox One con Kinect podrán utilizar el control por voz y todas las interesantes funciones que permite este accesorio. Por supuesto, el modelo que incluye Kinect se seguirá vendiendo de igual forma, con un precio de 499 dólares/euros. En cualquier caso Microsoft recuerda que seguirá innovando y mejorando su producto Kinect.
Tener dos modelos de Xbox One supone tener dos consolas con incluso diferentes públicos, por lo que aumentarán las ventas desde un primer momento. Todos aquellos usuarios que siguen sin convencerles Kinect y el precio más elevado de 100 dólares más, ahora seguramente tomen la decisión de comprar la consola estándar.
Además insistimos que al cambio la nueva Xbox One sin Kinect costará 100 euros menos en Europa, dejando su precio en 400 euros, el mismo que el de PlayStation 4.
Por último, Microsoft anuncia que los usuarios que no sean Gold podrán disfrutar de apps como Netflix o HBO Go. Con todo esto pretende ofrecer un mejor producto para ganar la batalla de consolas de nueva generación.
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