Windows 10 sigue avanzando de forma que ya está instalado en más de 400 millones de dispositivos. Desde el pasado mes de mayo hasta ahora ha conseguido sumar 100 millones de dispositivos, un ritmo que se ha pausado un poco.
Lo cierto es que Windows 10 ya no es una actualización gratuita desde el pasado 29 de julio, por lo que en principio las actualizaciones desde Windows 7 o Windows 8.1 son inferiores. Ahora la suma de nuevos dispositivos viene más de la compra o renovación de dispositivos.
El objetivo de 1.000 millones de dispositivos en cuestión de tres años, ya dos en realidad, parece cada vez más complicado pero algún cambio en el mercado o en la política de Microsoft podría hacer que finalmente cumplan este sueño en Redmond.
De momento esperamos la conocida actualización Windows 10 Redstone 2 en los próximos meses para traer más novedades de forma gratuita a todos los usuarios. En todo caso, la Redstone inicial o Windows 10 Anniversary Update no ha llegado a la gran mayoría de los usuarios, por lo que quedan sorpresas por conocer.
Recordemos que Windows 10 no es solo un sistema operativo para ordenadores, sino que también está en tablets, smartphones, consolas Xbox One y HoloLens. La cifra a conseguir viene a ser un tanto complicada, sobre todo porque en el terreno de los smartphones Windows no consigue despegar en general, un negocio que es un fracaso absoluto para Microsoft de momento.
Habrá que ver cuánto se tarda ahora en llegar a los 500 millones de usuarios con Windows 10, quizás varios meses todavía.
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