El uso de datos personales en WhatsApp, Telegram o Signal es muy diferente, y cabe preguntarnos qué app de mensajería nos espía más ante las numerosas amenazas a la privacidad en Internet que han surgido en los últimos años.
Tras la noticia de que WhatsApp cambia sus condiciones de privacidad para compartir nuestra información con Facebook muchos usuarios se están moviendo a Signal y Telegram, preocupados porque la red social les espíe.
A pesar de que WhatsApp ha retrasado la aplicación de las nuevas condiciones, que en ningún momento iban a afectar a los ciudadanos de la Unión Europea (incluyendo España), muchas personas ya no piensan dar marcha atrás.
Del mismo modo que comparamos si nos espía más Radar Covid, TikTok o Facebook, ahora compararemos las tres aplicaciones de mensajería instantánea más populares.
Datos personales recopilados
Al registrarnos en una app o servicio nos abren un "perfil" interno, al que asocian una serie de detalles, en ocasiones muy delicados. No solo sirven para el funcionamiento general, muchas veces su objetivo real es mostrarnos publicidad personalizada.
En WhatsApp se pueden descargar nuestros datos personales, uno de los derechos recogidos en el Reglamento General de Protección de Datos europeo (GDPR), y es sorprendente todo lo que almacena.
El gran ganador en este punto es Signal, que solo guarda el número de teléfono, pues es el elemento que nos identifica y permite que el resto de usuarios pueda iniciar las conversaciones.
Por su parte, Telegram guarda cuatro tipo de datos: número de teléfono, identificador de usuario, lista de contactos y el nombre de usuario que hayamos escogido para la cuenta.
En el caso de WhatsApp se disparan los elementos almacenados, incluyendo los siguientes: número de teléfono, identificador de usuario y de dispositivo, lista de contactos, datos publicitarios, historial de compra, ubicación, email, interacciones de producto, informes de errores y rendimiento, datos de pago, atención al cliente y el denominado "contenido adicional de usuario".
Esta tabla resume las diferencias:
A la vista de lo anterior, está claro que WhatsApp nos espía mucho más que sus competidores directos.
Permisos de la app, ¿tienen relevancia?
Solemos comparar la privacidad de las aplicaciones en base a los permisos que nos solicitan, y tiene sentido, pues a veces se pide mucho más de lo necesario. Por ejemplo, un videojuego en general no debería acceder a los contactos, a enviar SMS o a la ubicación.
En el caso de WhatsApp, Telegram o Signal necesitan permisos muy invasivos para funcionar por su propia naturaleza, y no hay mucho que se pueda hacer al respecto.
Requieren acceso a la agenda para elegir los contactos, a los SMS para la verificación y al almacenamiento para guardar los registros de las conversaciones y los archivos recibidos.
Además, les iremos dando más permisos con el uso: el micrófono para grabar audios, la cámara para mandar fotos y la ubicación para compartirla en los chats. Eso sí, al menos con Android 10 se limita que las apps nos localicen si no están abiertas, y en Android 11 se han restringido más los permisos, acercándose a la seguridad de iOS.
En conclusión, los permisos solicitados no son relevantes en este caso concreto, sino que el uso posterior de la información recogida determina quién nos espía. WhatsApp, Telegram o Signal son aplicaciones similares, que necesitan en todos los casos muchos permisos.
En resumen, WhatsApp es la app que más nos espía, con gran diferencia, seguida de lejos por Telegram y Signal en último lugar. Por lo tanto, es una buena idea buscar alternativas a WhatsApp si queremos cuidar nuestra intimidad y seguridad.
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