Ya sabemos que WhatsApp se trata de una app extremadamente popular, a día de hoy cuenta con más de 800 millones de usuarios. Pues bien, ahora parece que WhatsApp podría tener los días contados en Reino Unido como resultado de la guerra que David Cameron, el Primer Ministro, está llevando a cabo contra el terrorismo, y que puede llevarse por delante la privacidad de millones de ciudadanos británicos.
Desde luego, un debate serio, que se está reavivando con el crecimiento de la actividad terrorista en determinados países islámicos. Pero que nos va a afectar a todos los usuarios de smartphones.
No a las conversaciones cifradas
El problema con WhatsApp es que las conversaciones se cifran, de forma que nadie puede leer nuestros mensajes. El Gobierno británico considera inaceptable no poder acceder a todos los chats, por lo que en cuestión de semanas podría aprobar una ley que impediría que la actividad de WhatsApp continuase. Y otras apps como iMessage o Snapchat se enfrentarían al mismo problema.
Lo cierto es que en el Reino Unido las fuerzas del orden ya pueden intervenir las comunicaciones, pero quieren aumentar sus poderes. Pretenden que empresas como Google, Facebook, Microsoft, Apple o WhatsApp almacenen todo lo que buscamos, hacemos o decimos en Internet y se lo faciliten si lo piden.
Malos tiempos para la privacidad
Lo cierto es que resulta sorprendente que WhatsApp sea una de las afectadas, cuando muchas veces se la ha acusado que resultar completamente insegura. En cualquier caso, ya se han oído voces en contra de esta propuesta, que pretende que las fuerzas de la ley dispongan de unos poderes demasiado amplios, y que los puedan usar de forma arbitraria. Aunque la lucha contra el terrorismo sea importante, no puede servir de excusa para acabar con la privacidad.
Así que WhatsApp podría tener los días contados en el Reino Unido. No sabemos si aparecerá una versión que se adapte a las leyes del país, o si sencillamente se eliminará de las tiendas de aplicaciones. Lo que queda claro es que el gobierno de David Cameron está obsesionado con controlar lo que hacen sus ciudadanos en Internet.
¿Qué opinas de este tema? ¿Deberían estar prohibidas las comunicaciones encriptadas, o consideras que todos debemos tener derecho a a privacidad?
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