No uso Chrome, no compro en Amazon ni tengo nada de Apple: así me convertí en un "perroflauta tecnológico"

No uso Chrome, no compro en Amazon ni tengo nada de Apple: así me convertí en un "perroflauta tecnológico"

Las innovadoras y amables start-ups tecnológicas de principios de los años 2000 se han convertido en gigantescas multinacionales ávidas de más y más beneficios. El “big tech” estadounidense es una amenaza para la economía, y la sociedad en su conjunto, pero los consumidores tenemos más poder del que creemos al respecto.

Convertirme en un “perroflauta tecnológico” ha supuesto bastante esfuerzo, pero realmente existen buenas alternativas para muchas de las grandes de Internet. No son tan cómodas, en ocasiones, y en algunos segmentos no he conseguido el cambio, pero tampoco es realista aspirar a ser 100% coherente en un mundo tan complejo.

Yo he conseguido prescindir en mi día a día del navegador Chrome, del buscador de Google, de la tienda de Amazon y de todo el ecosistema de Apple. Pienso seguir apostando por empresas más pequeñas en otros ámbitos, porque el inmenso poder que el "big tech" acumula se está convirtiendo en una seria amenaza.

Chrome y el buscador de Google no son imprescindibles

Mi migración a Firefox como navegador y a DuckDuckGo como buscador fueron un poco difíciles en el momento de dar el paso, pero en cuestión de unos días estaba más que acostumbrado. Desde luego, no están al nivel de los servicios de Google, pero sí lo suficientemente cerca en todas las áreas clave.

En mi experiencia, cualquiera podría pasarse a Firefox y DuckDuckGo si pone interés, y no le supondría un cambio traumático. Al trabajar en un medio digital, no puedo dejar de tener la puesta vista en el buscador de Google. Por lo demás, solo lo uso para funciones concretas, como Google Shopping, a la hora de comparar productos.

Imagen - No uso Chrome, no compro en Amazon ni tengo nada de Apple: cómo evitar el "big tech"

El navegador web y el buscador de Internet son dos servicios increíblemente importantes en nuestra vida digital, donde entregamos una enorme cantidad de datos personales. Para mí, es fundamental que toda esta información delicada se reparta entre varias empresas, y que no formen del "big tech".

Amazon es un gigante que nos perjudica a todos

Amazon es una empresa que ofrece un muy buen servicio a precios atractivos, pero arrasando todo en el proceso: el pequeño comercio, los derechos laborales y muchos de sus propios socios, que acaban fuera del negocio cuando a Amazon ya no le resultan útiles.

En este sentido, tengo claro que Amazon representa un hipercapitalismo salvaje que nos perjudica a todos. También desde el propio capitalismo es cuestionable: una empresa que alcanza un excesivo poder de mercado expulsa a sus competidores, y con el tiempo ofrece un peor servicio a un precio mayor.

Las alternativas a Amazon existen, y muchas veces son tan sencillas como pensar en los negocios disponibles en nuestra ciudad. También en Internet hay muchas tiendas que la pueden sustituir en mayor o menor medida:

Alternativas a Amazon
Tecnología PcComponentes (española)
Media Markt (alemana)
Fnac (francesa)
AliExpress (china)
Hogar Ikea (sueca)
AliExpress (china)
Temu (china)
Ropa Zara y grupo Inditex (españolas)
H&M (sueca)
Zalando (alemana)
Asos (británica)
Decathlon (francesa)
Supermercados Mercadona (española)
Día (española)
Eroski (española)
Alcampo (francesa)
Multisector El Corte Inglés (española)
eBay (estadounidense)
AliExpress (china)


Existen muchas alternativas a Amazon, pero no se puede negar que su amplio catálogo y rápida logística no tienen igual. Pese a ello, llevo ya 4 años sin comprar en Amazon, y creo que ha valido la pena. Eso sí, ha sido un esfuerzo considerable, y ha realizado excepciones puntuales cuando no he encontrado alternativas viables en ciertas compras.

Rechazo a Apple por aspiracional… pero dependo de Google

Mi problema con Apple no es solo su enorme cuota de mercado, o los absurdos precios que le permiten situarse en el "top" de empresas más rentables del mundo. Apple se ha convertido en una marca aspiracional, muchas personas deciden comprar un iPhone para demostrar (o simular) que tienen dinero, como podrían comprarse un bolso de Louis Vuitton o un reloj Rolex.

Imagen - No uso Chrome, no compro en Amazon ni tengo nada de Apple: cómo evitar el "big tech"

Apple es un poco más respetuosa con la privacidad, y sus productos son buenos, pero con una muy mala relación calidad-precio. Aunque he tenido Mac e iPad en el pasado, es una marca cada vez más alejada de mis valores, porque da tanta importancia al ego de los compradores como a la tecnología en sí.

En cambio, poseo un móvil Android y empleo muchos servicios de Google para facetas importantes de mi vida, como el correo de Gmail, el almacenamiento de Drive, la navegación en Google Maps o el contenido de YouTube. También ordenadores Windows con Office, e incluso una consola Xbox (reconozco que la podría sustituir fácilmente por una PlayStation o una Nintendo Switch).

Al final, es complicado no depender de Google o Microsoft, porque son enormes, y no hay alternativas razonables para parte de lo que ofrecen.

La conclusión es que prescindir del "big tech" por completo es imposible, pero creo firmemente que las pequeñas acciones que mejoran el mundo valen la pena. Aunque no podamos ser coherentes al 100%, la suma de los gestos cotidianos de millones de consumidores construye el modelo de sociedad en el que vivirán las futuras generaciones.

¿España está preparada para un ciberataque a gran escala?

  • Ver Comentarios