Con el cambio de año toca analizar el futuro de Netflix, una empresa en plena transformación, y todo apunta a que acabará con las cuentas compartidas en 2023. Netflix ha realizado numerosos cambios recientes y trabaja en muchos otros, pero todos ellos llevan al fin de las cuentas compartidas entre varios usuarios.
Nos hemos acostumbrado a tener Netflix barato al compartir el plan Premium entre 4 personas, que manera que cada cuenta salía por unos 4 o 5 euros/dólares al mes. Las sucesivas subidas de precio no han reportado a Netflix los ingresos que desea, así que su objetivo es que cada usuario pague por una cuenta propia.
Netflix no ha confirmado oficialmente que las cuentas compartidas desaparecerán, pero las restricciones que prepara para 2023 dejan claras sus intenciones. Para comenzar, sí es oficial que Netflix cobrará un extra a las cuentas compartidas, es decir, aquellas que se utilicen fuera del hogar del titular.
El precio no será muy alto, de unos 3 euros/dólares al mes, pero es que, además, solo se permitirá compartir una cuenta fuera del domicilio principal. Es decir, de las 4 pantallas a la vez que admite Netflix Premium, solo una se podrá ver fuera de la casa donde vivimos al pagar ese extra.
Este sistema tiene pinta de ser solo de transición, pues Netflix obligará al usuario "invitado" que abra una cuenta diferente con contraseña propia. Es decir, la idea de compartir contraseña, que incentivó durante años para crecer, ya no la considera aceptable.
También se ha creado un sistema para transferir el perfil de Netflix al cambiar de cuenta, que facilita el proceso, y nos indica de nuevo el enfoque de la compañía.
Netflix con anuncios lucha contra las cuentas compartidas
El plan barato de Netflix con anuncios se presentó como una manera de contener la pérdida de usuarios, o incluso crecer entre el público que no estaba dispuesto a pagar el precio del plan básico (que en cada país se adapta al poder adquisitivo).
Sin embargo, también tiene sentido ver el plan con anuncios como un elemento más de la estrategia para acabar con las cuentas compartidas. Habrá millones de personas expulsadas de los grupos de Netflix Premium (hasta 4 pantallas) que se plantearán qué hacer, y de este modo tienen una alternativa de un precio similar.
La modalidad con anuncios cuesta 5,49 euros o 6,99 dólares mensuales frente a 7,99 euros o 9,99 dólares de Netflix Básico, así que es una cifra más cercana a lo que pagaban en el grupo, que ayudará a contener las bajas.
Otro tema es si vale la pena sufrir los anuncios por una diferencia tan pequeña de dinero. En cualquier caso, quienes abandonen un plan Premium por otro más sencillo van a ver una importante bajada de calidad, pues pierden la imagen 4K HDR y el sonido Dolby Atmos.
Netflix quiere aumentar los ingresos por usuario real, y está dispuesta también a ofrecer más contenido a cambio. Además de la continua inversión en series y películas con presupuestos cada vez mayores, el catálogo de juegos de Netflix no ha dejado de crecer.
También ha añadido nuevos contenidos, como las clases de entrenamientos virtuales en Netflix, y algunas predicciones apuntan a que en 2023 veremos los programas en directo de Netflix por primera vez.
Netflix necesita ingresos desesperadamente
Como cualquier empresa, Netflix quiere ganar más dinero, pero la estrategia de eliminar las cuentas compartidas es más necesidad que avaricia, o al menos eso opinan muchos analistas económicos, que consideran que debe aumentar sus ingresos para mantenerse competitivo.
Netflix tiene unos importantes costes de producción de series y películas propias, que cada vez deben ser mejores en calidad, con presupuestos más altos en producción, efectos especiales y actores conocidos.
Actualmente, Netflix ya no puede confiar apenas en el contenido licenciado a terceros, porque las grandes de Hollywood han creado plataformas de streaming propias. Con la llegada de Disney+ perdió muchísimo catálogo (Marvel, Star Wars, Pixar, etc.) y el nuevo HBO Max supuso que Warner eliminase también su mejor contenido (como la saga Harry Potter).
Otro detalle relevante es que el contenido de Netflix solo se rentabiliza a través de las cuotas, algo que la pone en una situación menos cómoda que sus rivales llegados a la situación actual.
Por ejemplo, cuando una película llega a Disney+ o HBO Max, muchas veces ya ha sido rentable tras el estreno en salas, y aún puede ganar algo más gracias a la televisión o las ediciones en discos físicos.
Por no hablar de que las grandes compañías de entretenimiento obtienen otros ingresos de sus propiedades intelectuales (merchandising, licencias a otras empresas, parques de atracciones, etc.), un mundo que Netflix aún tiene por explorar.
Sea justificado o no, deberíamos aceptar que Netflix eliminará las cuentas compartidas en 2023, o al menos las hará casi inviables. Ahora queda en nuestras manos seguir en el servicio, que será más caro y tendrá peores condiciones, o buscar otra alternativa para disfrutar de series y películas en streaming.
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